Los filtros UV químicos (orgánicos) son el tipo de protección solar más popular debido a su cómoda aplicación en la piel. Sin embargo, su uso plantea algunos problemas graves de salud. Los filtros UV químicos también se han visto implicados en daños ecológicos, debido a su efecto en el medio ambiente marino.
Los filtros minerales (inorgánicos) se asientan sobre la piel creando una barrera protectora que no penetra en ella. El óxido de zinc protege de forma natural contra los rayos UVA y UVB, lo que significa que tiene una protección de amplio espectro. El dióxido de titanio bloquea eficazmente los rayos UVB, pero no protege totalmente contra los UVA.


Protección de amplio espectro
Los rayos UVBson la causa principal de las quemaduras solares.
Los rayos UVA son la causa del daño cutáneo a largo plazo: la pérdida de elasticidad y las arrugas.
Tanto los rayos UVA como los UVB intervienen en el daño de la piel y en la formación del cáncer de piel. Cuando un filtro UV los bloquea a ambos, se considera una protección de espectro completo. .